PLANES DIRECTORES

Todo tipo de Patrimonio Histórico y de relevancia en la sociedad debe ser protegido, así lo recoge la ley de Patrimonio Histórico Español de 1985. Estos bienes de patrimonio histórico que por su relevancia social e histórica y su singularidad necesiten de protección, son declarados Bienes de Interés Cultural (BIC).

Una vez se decide conservar estos bienes se valora el estado en el que se encuentran, ya que muchos de ellos están en ruinas y fuera de uso. Con el fin de ponerlos en funcionamiento se redactan los planes directores, que son los documentos que establecen las directrices que marcarán las futuras actuaciones para la puesta en valor de estos importantes bienes de interés cultural (BIC).

Los planes se basan en un contexto histórico y geográfico determinado para elaborar una serie de estudios medioambientales, arqueológicos, de patologías y jurídico; tanto de los inmuebles como de las zonas exteriores circundantes, que permitan conformar las bases para decidir las intervenciones que se van a realizar. 

Los dos últimos planes directores que hemos presentado son “Villa Marco” en Campello y el “Molí de Paper” en Ibi. 

Villa Marco es una villa de recreo emplazada en la Huerta de Alicante en cuya construcción se empelaron algunos de los criterios eclécticos habituales utilizados a partir del siglo XIX y comienzos del siglo XX. 

El inmueble principal queda resuelto en cuatro alturas y la distribución actual de las plantas responde a las sucesivas reformas interiores. En la fachada sur aparece un porche y el acceso a la finca se realiza a través de caminos largos y rectilíneos con hileras de árboles que desembocan en un gran patio. El jardín formaba parte de una finca agrícola que ha ido evolucionando a través de los años y gusto de los distintos propietarios. Entre las construcciones auxiliares del jardín destacan su capilla neogótica, el aljibe con cubierta de fragmentos de estalactitas y estalagmitas de la cueva de Canelobre y el invernadero.

El objeto de este Plan Director es el de articular la intervención para poner en valor, tanto el inmueble como el jardín. 

El Molí de Paper de Ibi comenzó a funcionar en 1860 y a lo largo del tiempo estuvo explotado por varios arrendatarios provenientes de las poblaciones papeleras cercanas a Bañeres y Alcoy. Hasta que pasada la época de esplendor del papel de fumar y su elaboración a mano, el Monte de Piedad de Alcoy forzó el embargo y subasta del molino. Fue entonces cuando la producción de los juguetes desmarcó a la del papel y pasó a llamarse la villa juguetera. 

Posteriormente quedó en desuso hasta que con el estallido de la Guerra Civil se convirtió en una colonia de acogida que alojó a multitud de niños y niñas de diversos lugares de España durante los tres años que duró la Guerra Civil Española (1936-1939)

El inmueble se compone de tres cuerpos principales y un patio interior. A día de hoy la mayor parte de las carpinterías están rotas, lo que hace que los huecos estén abiertos y sean accesibles. Por eso, para evitar que entrara la gente, se tapiaron los que estaban a cota del suelo. Diferentes derrumbamientos han hecho que parte del inmueble sea inaccesible, como la segunda planta, debido a la falta de escaleras y la fragilidad de su forjado, que se va derrumbando, junto con la cubierta.

El Plan Director incluye la relación de elementos a conservar debido a su importancia dentro del edificio y a su carga histórico, al igual que un posterior plan de actuación, en el que se estipulan las fases del proceso, valorando la viabilidad del conjunto.